El Aprendizaje Basado en Proyectos con enfoque transdisciplinar (ABPy) es una metodología activa de aprendizaje centrada en el estudiante, con un diseño abierto y flexible que permite la riqueza de la socialización, la evaluación formativa y continua, así como la combinación de varias disciplinas que promueven un aprendizaje integral y significativo en el estudiante.

Según la Consejería de Educación y Universidades de Canarias (2017), constituye una estrategia metodológica activa en la que el alumnado se enfrenta a situaciones de la vida real planteadas como retos, con el fin de garantizar aprendizajes que culminan con la creación de un producto con validez social.

Un proyecto requiere tiempo, organización y claridad de ideas, pero, sobre todo, motivación para alcanzar una meta. En este tipo de aprendizaje, el alumno se enfrenta a retos o situaciones problemáticas de la vida real, a las que debe dar respuesta o solución a través de la creación de un producto con aceptación social. En este proceso se espera que investigue, interactúe, planifique, tome decisiones y evalúe junto con su equipo de trabajo (León, O., 2022).